Los diversos estudios de competitividad hechos en América Latina muestran que el fenómeno de la informalidad mantiene dimensiones importantes en economías como la peruana y, estadísticamente hablando, el sector más representativo es el comercio informal o ambulatorio.

Sin embargo, la realidad muestra que hay dos grandes grupos de comerciantes ambulantes:

Los de carretilla: Generalmente ubicados en las veredas en centros de alto tránsito, de posición fija o pasiva.

Los  cruceristas: Que operan a pie y en zonas de tránsito más bien vehicular, presentando como ventajas la de una mayor movilidad, mucho mayor número de contactos visuales por hora, mayor proactividad en el acercamiento a los consumidores y que gozan de espectadores cautivos gracias al caos vehicular de nuestra ciudad.

Nuestras investigaciones muestran que un crucerista en promedio puede disfrutar de hasta 03 minutos de atención completa por parte de su auditorio de automovilistas. Es el vendedor perfecto.

En una investigación realizada por Mercadeando S.A. en 25 cruces de avenidas principales a lo largo de Lima Moderna aplicada a una muestra de casi 400 cruceristas, se encontró que el 34.8% de ellos comercializa golosinas; 13% confitados; 9.3% celulares y accesorios; 8.7% libros (piratas naturalmente); 6.2% artículos de oficina y otros.

Obviamente los ingresos diarios -ventas- de los cruceristas varían en función a las líneas de productos que manejan, encontrándose el nivel más bajo de S/. 20.00 diarios para flores hasta S/. 300.00 diarios para los que comercializan accesorios para celulares, mientras que los ‘golosineros’ oscilan entre S/. 37.60 y S/. 59.60.

Si cogemos solamente esta última cifra, podemos concluir que un crucerista comercializa en promedio entre S/. 1,128.00 y S/. 1,788.00 mensuales de golosinas, cifra que si la multiplicamos solamente por la cantidad de golosineros que fueron entrevistados en el estudio de Mercadeando S.A., encontraríamos que su movimiento mensual se ubica entre los S/. 145,726.00 y los S/. 230,991.72.

Las cifras presentadas pueden fácilmente multiplicarse por 20 para alcanzar a dimensionar el valor económico que comercializan los cruceristas de golosinas SOLO en los distritos de Lima Moderna.

¿Por qué estas cifras deberían interesarle a las grandes empresas?

Porque solo el 3.1% de los cruceristas señala tener contacto directo con las empresa proveedoras; su interlocutor en el 96.9% de los casos son distribuidores y/o mayoristas; porque el 55.8% de los cruceristas señala no recibir ningún tipo de promoción o incentivo y apenas el 8.6% de los entrevistados recibe material publicitario (gorras, polos, afiches, etc.) de los productos que comercializa.

A la luz de estas cifras, no es una exageración decir que los cruceristas son una fuerza de ventas desaprovechada por las empresas de productos de consumo masivo.

¿Cuál es el impacto que pueden tener los cruceristas para una empresa de consumo masivo? ¿Crees que se está desaprovechando esta fuerza de ventas?

Queremos saber tu opinión.

© Mercadeando S.A., Febrero 2012
Fernando Zelada Briceño – Presidente.
Marlith Segura Castillo & Waldo Mori Borja, Investigadores de Campo.